Lugar de tradición viva
Museo Comunitario
Del pueblo Otomí Chichimeca
Ubicado en la delegación municipal de San Miguel en el municipio de Tolimán, se encuentra el Museo Comunitario del pueblo Otomí-Chichimeca.
Tras la declaratoria del 30 de septiembre del año 2009, en el que la UNESCO resolvió el elemento cultural denominado: Lugares de memoria y tradiciones vivas de los pueblos otomí-chichimeca de Tolimán.
La Peña de Bernal, guardián de un territorio sagrado, se encuentra en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Por ello, tras esta declaratoria se puso en el primer plano la atención internacional del valor de las culturas indígenas, como parte esencial de la memoria, la identidad, la pluralidad y la vitalidad cultural de Querétaro y de todo el país.
En dicho museo, se encuentran algunas piezas tradicionales de esta cultura, como vestuarios, instrumentos y otros artículos que se muestran en una pequeña sala que se encuentra en las instalaciones de la Delegación.
Adicionalmente, se presentan una serie de textos museográficos en los que se habla de la importancia de sitios como este, en donde se preserva la memoria histórica de los pueblos, como en este caso, originarios de México prehispánico.
En uno de estos textos nos menciona que este lugar se realizó con la finalidad de “contribuir a la comprensión, el cuidado y el aprecio de nuestra cultura otomí-chichimeca, las comunidades y el gobierno municipal de Tolimán, con el apoyo de especialistas e instituciones federales y estatales.
Ahí se menciona que se decidió establecer “cuatro museos comunitarios en San Miguel Tolimán, San Antonio de la Cal, San Pablo Tolimán y San Pedro, cabecera Municipal”, pero gracias a la mala gestión del presidente municipal en turno, Edgar Montes, no se logró concretar más que este lugar.
Se menciona que la intención de estos museos era “ofrezcan al visitante un lugar que les explique el significado y la riqueza de nuestras tradiciones, nuestras ideas y nuestra manera de vivir”.
De entre las piezas que muestra este Museo, podemos observar diversos elementos que se utilizan para la realización de los ritos para la fiesta del Señor San Miguel.
Las tradicionales danzas como les nombran, y elementos como las cruces, los inciensos, los saumadores, las velas, las flores, etc.
Pero también están las vestimentas de los diferentes participantes en este rito que dura casi 3 meses.
Es increíble como en un pequeño espacio se puede sintetizar toda una cosmovisión del mundo y de toda una tradición.
Podemos ver también otros elementos que no solo forman parte del rito de la fiesta, sino de toda la cultura indígena del pueblo otomí, del que se sienten orgullosos de pertenecer la gran mayoría de los habitantes de Tolimán.
Me refiero a la comida, que en la celebración del Día de San Miguel, toma un punto central en estos festejos.
En general, el pueblo Otomí tiene un lugar muy especial para la comida y cómo forma parte de su entorno y de su solidaridad, ya que es un elemento que les gusta compartir no solo de manera cotidiana sino especialmente en sus fiestas tradicionales.
Otro elemento de esta fiesta es su música, la cual en la celebración de San Miguel no llega más allá de tambores y flautas, que con sus ritmos acompañan a la danza que baila en honor del patrono de la fiesta.
Si quieres visitar un lugar muy especial que te muestra de manera viva las tradiciones y cultura de este pueblo ancestral, no dudes en visitarlo, a sólo unos minutos de la Cabecera Municipal de Tolimán, en la carretera que se encuentra entre este municipio y el de Colón, lo puedes encontrar.