La noche del 9 de noviembre de 2024, el bar «Los Cantaritos» en Querétaro se convirtió en escenario de una tragedia que sacudió a la comunidad. Un grupo armado irrumpió en el establecimiento, dejando un saldo de 10 personas fallecidas y 13 heridas.
Este ataque, que evidenció la violencia generada por disputas entre grupos delictivos, llevó a las autoridades a intensificar sus esfuerzos para capturar a los responsables. Las investigaciones apuntaron a José Francisco «N», alias «Alfa 1», líder de la célula delictiva «Los Escorpiones», vinculada al Cártel del Golfo y al Cártel de Santa Rosa de Lima.
El 20 de marzo de 2025, en un operativo conjunto que abarcó Querétaro, Guanajuato y Yucatán, fuerzas federales lograron la detención de «Alfa 1» y otros ocho integrantes de su organización. Entre los detenidos se encontraba Sandra «N», alias «La Patrona», pareja sentimental de «Alfa 1» y enlace operativo de la célula, encargada de la compra y venta de drogas.
Estos operativos simultáneos, que involucraron a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Secretaría de Marina (SEMAR), la Fiscalía General de la República (FGR), la Guardia Nacional (GN) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), representan un golpe significativo contra el crimen organizado en la región. El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, destacó la importancia de estas acciones en la lucha contra la impunidad y la violencia extrema.
La comunidad de Querétaro, aún conmovida por la tragedia en «Los Cantaritos», observa con esperanza estos avances en materia de seguridad, esperando que se traduzcan en una paz duradera y en la justicia para las víctimas de aquel fatídico noviembre.
