El municipio de Peñamiller ha presentado un presupuesto para 2025 de $219.4 millones, lo que representa un aumento de 7.64% respecto a 2024. Si bien este incremento parece moderado, el análisis de su distribución evidencia que los cambios son mínimos y que la administración sigue operando con una estrategia de gasto predecible y poco innovadora.
Distribución del Gasto
- Gasto Corriente: Se lleva la mayor parte del presupuesto, alcanzando $175.5 millones, lo que representa 80% del total.
- Inversión Pública: Crece en $5.9 millones, alcanzando $41.7 millones, lo que representa 19% del total.
El balance no ha cambiado significativamente, ya que la inversión sigue siendo una fracción menor en comparación con el gasto administrativo.
Áreas de Mayor Crecimiento
- Servicios Generales (+13.61%) y Transferencias (+11.56%) muestran incrementos considerables. Esto sugiere una mayor dependencia de contratos de servicios y subsidios, sin garantizar mejoras estructurales en el municipio.
- Bienes Muebles (+115.27%), con un aumento de $1.1 millones, levanta sospechas: ¿son compras realmente necesarias o simplemente adquisiciones burocráticas?
- Inversión Pública crece un 16.65%, lo cual es positivo, aunque insuficiente en comparación con municipios similares.
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Comparación con Municipios Similares
- Tolimán ($254.0 millones), con un presupuesto superior, ha logrado mantener un mejor equilibrio entre inversión y gasto operativo.
- Landa de Matamoros ($258.5 millones), con menos recursos que Peñamiller, ha aumentado su inversión pública en $41.6 millones, una cifra notablemente mayor que los $5.9 millones de Peñamiller.
- Arroyo Seco ($222.2 millones) tiene un enfoque de inversión más claro, con aumentos en infraestructura y proyectos estratégicos.
Un Presupuesto Estancado
Peñamiller sigue sin una estrategia de crecimiento sólida. Aunque hay incrementos en la inversión pública, la estructura del gasto sigue centrada en el funcionamiento de la administración más que en el desarrollo municipal. Si el gobierno local realmente quiere transformar la economía de Peñamiller, necesita apostar por infraestructura y proyectos productivos en lugar de seguir con una inercia burocrática.