Bolivia.-En un mundo donde el caos vehicular y la falta de civismo parecen ser la norma, un grupo de vacas bolivianas ha llegado para darnos una lección magistral sobre cómo coexistir en paz con el entorno urbano. Porque, claro, cuando los humanos no saben usar ni las cebras peatonales, estas ilustres bovinas deciden hacerlo mejor y demostrar que sí es posible cruzar una carretera sin arriesgar la vida.
La escena, que ocurrió en Bolivia y ya se ha vuelto viral, muestra a nuestras heroínas cuadrúpedas desfilando por un puente peatonal como si de una pasarela de alta moda se tratara. No había caos, no había vacilaciones, solo una coreografía impecable de pasos bien calculados sobre las rampas diseñadas, aparentemente, para su noble causa.
El momento fue capturado por un asombrado automovilista, probablemente alguien que minutos antes estaba maldiciendo el tráfico, pero que tuvo que detenerse, boquiabierto, al ver cómo estas vacas no solo respetaban las normas, sino que lo hacían con la elegancia de quienes saben que son el espectáculo del día.
En el video, que ya ha sido compartido miles de veces, las vacas avanzan con calma y determinación, como si siempre hubieran sabido que ese puente era suyo. “¡Es más de lo que puedo decir de algunos humanos!”, comentaba un internauta, dejando claro que, en el ranking del civismo global, las vacas acaban de subir varios peldaños.
Esta insólita hazaña no solo provocó risas y asombro, sino que también nos dejó pensando: ¿será que estas vacas son más conscientes que nosotros? Mientras muchos conductores siguen ignorando los puentes peatonales, estas criaturas demostraron que, con un poco de ingenio y mucho respeto, cualquier obstáculo puede ser superado.
Quizás es hora de replantearnos quiénes son realmente los civilizados en esta ecuación. Porque si algo quedó claro con este episodio, es que incluso en un mundo lleno de presas urbanas y colisiones, hay un grupo de vacas que no solo entiende cómo usar las infraestructuras, sino que lo hace con más gracia de la que muchos podemos soñar.
Así que, la próxima vez que estés a punto de cruzar por donde no debes, recuerda: hay vacas en Bolivia que podrían juzgarte, y con toda razón.