Querétaro, Qro.-Ante la reciente resolución del Tribunal Electoral del Estado de Querétaro (TEEQ) que revocó la diputación de Ulises Gómez de la Rosa, candidato de la coalición Morena-PVEM-PT en el Distrito 7, queremos expresar nuestro enérgico rechazo y denunciar el evidente fraude electoral perpetrado por este organismo, que actúa bajo la influencia del PAN-Gobierno.
No debemos olvidar el origen de esta decisión, sustentada por magistrados que llegaron a su puesto gracias al compadrazgo, y que hoy, como magistrados carnales, defienden los intereses del PAN en lugar de impartir justicia. Estos personajes se han dedicado a atacar a la oposición, inventando criterios y torciendo la ley sin ninguna argumentación jurídica, para resolver siempre a favor del partido en el poder. Su actuación no es imparcial ni objetiva; es política y cínica, distorsionando el derecho al introducir términos como «nulidades e indicios» que no están previstos en la ley y aplicándolos arbitrariamente en contra de la oposición.
Es particularmente grave el caso del magistrado Ricardo Gutiérrez, quien antes de ser nombrado, servía a los mismos intereses que ahora protege desde el TEEQ, utilizando su posición para favorecer a su círculo cercano y resolviendo asuntos familiares con tráfico de influencias. Este mismo magistrado, quien debería actuar con imparcialidad, se dedicó en la sesión de ayer a atacar al gobierno federal, justificando sin razón alguna su voto en contra de la voluntad popular expresada en el Distrito 7.
Por todo esto, hago un enérgico llamado a las autoridades y, sobre todo, a la ciudadanía, para que juntos defendamos la democracia y el voto legítimo de las y los electores del Distrito 7. No permitiremos que se consolide este intento de fraude electoral. Exigimos que se inicie un juicio político contra estos magistrados que se amparan en la toga judicial para cometer fraudes en favor del panismo.
Las causales para dicho juicio son claras: la violación sistemática de los derechos humanos y de las disposiciones constitucionales, lo cual es suficiente para su separación e inhabilitación del cargo, así como para las sanciones administrativas y penales que correspondan.
Lo que presenciamos ayer fue un intento flagrante de fraude electoral que busca imponer un resultado ilegal y absurdo en el Distrito 7, en contra de la voluntad popular y de mi candidatura a diputado local. Durante la contienda electoral y en el recuento administrativo ante el Consejo Distrital, tuvimos que luchar contra un sistema oficial compuesto por el IEEQ y el PAN, que en concierto actuaron como uno solo. A pesar de las amenazas, logramos que se reconociera el triunfo de la 4T y de su servidor, defendiendo los votos de los electores a pesar de las amenazas directas hacia mi persona y mi familia.
Denunciamos la existencia de un contubernio entre el PAN, el gobierno estatal, el IEEQ y el TEEQ para consolidar un fraude que impida la llegada de los diputados electos de la 4T, y que busca construir una mayoría artificial y robada en la Legislatura Estatal. Desde ahí, intentan proteger al gobernador y sus secuaces, imponiendo su voluntad de manera autoritaria y opaca.
Nos comprometemos a defender nuestro derecho y el voto de los miles de electores que decidieron por un cambio y por la implementación de la Cuarta Transformación en el Distrito 7, en Santa Rosa Jáuregui y en todo Querétaro. Será la próxima legislatura federal, donde la 4T tiene mayoría calificada, la que se encargará de resolver el juicio político que iniciaremos contra estos magistrados electorales corruptos, revelando su papel como golpeadores y servidores del gobierno panista en turno.